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Para comenzar con el nuevo apartado de Aprendizaje Basado en Juegos (ABJ), os traigo un recurso muy sencillo pero eficaz para el aprendizaje y la práctica del lenguaje musical: componer con dados musicales.
Esto no es nuevo. Componer música utilizando el azar y en este caso los dados, se utilizó también en siglo XVIII. Se atribuye -aquí hay controversias entre los musicólogos- a W. A. Mozart el ingenio de componer en 1787 un vals utilizando los dados. Es conocido como el manuscrito Mozart KV 516f, aunque no es el único ejemplo.
Si queréis probar a componerlo, os dejo dos recursos:
Incluso, gracias a la sencilla programación que ofrece Scratch, y para aquellas aulas que cuenten con recursos digitales, se pueden hacer composiciones en cuestión de minutos utilizando las normas propuestas por Mozart (tenéis que tener un dado numérico a mano):
(Autor: Srossi33)
Para aquellos que prefieran tener un recurso de manipulación real os traigo unos dados personalizados. Si habéis jugado o conocéis los dados de Story Cubes veréis que la mecánica es muy similar. En el caso de los dados musicales, se trata de una serie de diez dados de seis caras en los que están representadas las figuras musicales, indicaciones de compás, formas musicales... como veréis más adelante.
Como los dados musicales que hay en el mercado de las editoriales educativas no han logrado cumplir con precisión lo que necesitaba para mis clases, decidí hacerlos y personalizarlos completamente.
Además de los dados, añadí una moneda con la clave de Sol en una cara y la de Fa en otra. Este elemento servirá para componer en esta clave en cursos superiores donde se haya introducido la clave de Fa (si la moneda cae de ese lado), pero es un elemento opcional.
Una imagen vale más que mil palabras. Así quedaron los dados:
Los dados, para que sirvan para componer, deben -deberían- contener, al menos, lo siguiente (aquí esto es al gusto o necesidad del profe):
- Un dado de formas musicales: ABA, ABACA, AB, A'A''A''', etc...
- Un dado de indicación de compás: 2/4, 3/4, 4/4, 6/8, 12/8 y 5/4.
- Un dado con "figuras especiales": tresillos, figuración con puntillo, etc...
- Dos dados de silencios.
- Cinco dados de valores.
Hice un total de cinco juegos de dados. En cada juego hay diez dados y una moneda que pueden ampliarse con más símbolos según los elementos del lenguaje musical que queramos que los alumnos trabajen en su composición.
Pensar en la agrupación es importante y aquí es interesante que el profesor conozca a su alumnado para conseguir que los grupos sean lo más heterogéneos posibles donde todos colaboren en la misma medida en la composición de la pieza. Utilizar los roles del aprendizaje cooperativo de forma rotativa (por rondas) también viene muy bien para que cada alumno sepa cuál es su trabajo en cada momento. Mi recomendación es no superar los cuatro miembros por equipo.
Normas del juego sin moneda de clave:
1- Tirad todos los dados a la vez y apuntad en la hoja de composición (descarga más abajo) el resultado de cada dado.
2- Decidid cuántos compases va a tener cada parte siendo cuatro el mínimo que deberás escribir en cada parte.
3. Podéis usar las figuras que han salido en los dados tantas veces como necesitéis.
4. Indica el o los instrumentos para los que vas a componer.
5. Podéis ayudaros de cualquier instrumento mientras componéis.
6. Utilizad el espacio de pentagrama de la hoja.
7. Si tenéis algún comodín o SuperRecompensa, podréis usarlos como ayuda.
Si queréis utilizar la moneda de clave las normas serían las mismas tirando la moneda al principio de cada proyecto de composición.
Hoja de composición para descarga:
Estaré muy agradecida si aportáis alguna idea más para utilizar los dados musicales comentando debajo de esta entrada.
¡Gracias por leer!
Slitz bai!